miércoles, 22 de marzo de 2017

LA ORTOGRAFÍA: ¿Es realmente tan importante?

LA ORTOGRAFÍA:  ¿Es realmente tan importante?

“Lo primero es admitir que la mayoría de nosotros no tenemos una buena ortografía.
Lo segundo sería tener el firme empeño en mejorarla.“

El lenguaje es poderoso (hasta Dumbledore lo dice) y una de su armas son los signos de puntuación. Hoy en día, la mayoría de los padres no le dan importancia a detalles como un acento o una coma en las tareas escolares de sus hijos. Sin embargo las palabras y frases tienen la capacidad de cambiar su significado gracias a uno o dos sencillos trazos y esto puede meternos en graves problemas si no lo consideramos seriamente,  mismos que  pueden ir desde confusiones sencillas y problemas básicos de comunicación  hasta  líos legales.

Como maestra constantemente lidié con estudiantes que comentaban cosas como “Si ya sabe quién soy, ¿para qué quiere que escriba mi nombre bien?”. Mi  respuesta siempre era “¿Y si no sé quién eres y hay alguien con tu mismo nombre?”. En un salón de clases es fácil recordar  las caras  y los nombres, pero en el mundo entero, ¿cuántos errores pueden suceder por escribir una palabra?

Preguntémosles a todas las María del Carmen de México y veamos cuántas empezaron en su primera y original acta de nacimiento siendo María del Carmen para terminar siendo Ma. del Carmen, trastocando así su vida laboral, financiera y como derechohabiente de algún servicio. Eso sin contar que no es lo mismo llamar a una mujer por su nombre completo, “María” que decirle “Ma.”.


Ahora bien, un texto puede variar por trazos simples como  una coma o un acento y eso es otra cosa que puede trastocarnos el significado de una simple frase. Por ejemplo no es lo mismo:



podríamos decir:



Otra frase que se vuelve aterradora al cambiar de significado sería:



O para iniciar una guerra entre sexos, nada como esto:



Hablando de situaciones legales, algo como esto podría significar la diferencia entre la vida y la muerte de alguien: 



Mi abuelo nos enseñaba cómo escribir correctamente, como en la vieja escuela. Por tanto, mi madre y tíos continuaron con esa costumbre. Una parte de mí odia ver como se pierden esas cosas, la otra entiende que es parte de crecer y avanzar en la civilización pero no dejo de pensar, si las guerras muchas veces se han debido a malos entendidos o fallas en la comunicación, ¿no es el lenguaje bien expresado nuestra mejor arma para conseguir la paz?

FUENTE DE INSPIRACIÓN:  Amantes de la Ortografía y su  bella imagen.


martes, 21 de marzo de 2017

“Ok, va a violarme, este es el momento en que va a violarme”

“Ok, va a violarme, este es el momento en que va a violarme”

Ok, quienes me conocen saben que tengo una especial adversion hacia el clan Kardashan. No sé precisar qué es aún pero hay algo que no me gusta y bueno, supongo que es cuestión de gustos y empatías y es por eso que esta noticia de alguna manera me deja molesta e impactada de una forma diferente.

En octubre pasado, Kim Kardashian, famosa  por ser parte de un reality show que muestra su vida como  esposa del rapero P Daddy  y a sus hermanas empresarias y herederas en Hollywood, fue asaltada durante una visita a París.

Recientemente, como parte de dicho reality, ha salido a la luz un vídeo que la muestra hablando con sus hermanas y compartiendo cuales fueron sus pensamientos al momento de los hechos.  En dicho vídeo explica su temor a morir, a ser violada y a dejar a su familia y su vida inconclusa.
De una manera que, debo admitir me tocó, relata como pusieron una pistola en su cabeza y ella pensaba en huir pero temía que le dispararan por la espalda. Narra como uno de los asaltantes la ató de las manos con cinta y la jaló hacia la orilla de la cama donde él estaba y como creyó que iba a ser violada y se preparó mentalmente para eso.

Para su fortuna esto no sucedió y sólo fue atada nuevamente, sin embargo el temor por su vida seguía y pensó en su hermana y, en que si la mataban, ella encontraría su cuerpo.

 “Recé para que Kourtney tuviera una vida normal tras ver mi cuerpo muerto en la cama”

Su breve narración mostrada en videos en la internet termina con ella  pensando en su familia, en  sus hijos, esposo y madre y en cómo temía no saber cuál sería el final de esa historia.

Me queda claro como el agua que la violencia de género no excluye a nadie, ni a las ricas y famosas, ni a las que pueden pagar miles de dólares por seguridad y que todas somos vulnerables SIEMPRE. No hay dinero que valga o fama o apellido y nadie, ni si quiera alguien que me desagrada como ella, se merece que algo así le suceda. No le sucedió, pero a muchas otras si.

La parte que me indigna de su relato es el temor automático que sintió ante la posibilidad de una violación porque ese no es un temor común en los hombres. Ellos temen otras cosas, morir, ser golpeados, dejar a sus familias desprotegidas. Que no se mal entienda, ambos, todos los temores son válidos, pero  ESE temor es con el que vivimos todas, desde la universitaria hasta la secretaria, la intendente y la celebridad de reality show millonaria.  Lo vivimos camino a casa o al trabajo, al salir del colegio, al ir de compras o a bailar, al salir a hacer ejercicio, es más, lo sentimos en nuestra propia casa de noche al oír un ruido. TODAS.


Las otras dos cosas que me quedan tristemente claras son, uno, que millones de hombres, la gran mayoría en realidad, ve esto como broma, como juego, y como algo de que mofarse. 

Todos los siguientes son comentarios reales de UN solo sitio de internet:












Y dos, que nosotras somos y seguimos siendo nuestro peor enemigo… Ya no debemos temer a los violadores sino a todas aquellas que celebran ese hecho y a quien lo comete, rechazan la veracidad del mismo venga de quien venga, anulan la angustia de la víctima, insultan a la persona por quien es sin considerar que un hecho así no lo merece NADIE y desacreditan todo un relato por tratarse de una celebridad de reality… o de cualquier mujer en última instancia. Niega la verdad de una y negarás la de todas. Anula el dolor de una por su condición y negarás el dolor de todas. 




Y no, no tapé ni borré sus nombres, quizás nunca lo lean, probablemente así sea pero que la vergüenza de lo que son no se esconda.